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Hoy vamos a hablar de un tema muy interesante: los streamings IRL (in real life). Cada vez están más de moda y en un mundo con tanta competencia de streamers, hacer algo distinto es básico. Un streaming in real life, es decir, enseñar a tu audiencia cómo es tu día a día, llevártelos a la cocina mientras haces una receta o bien incluso algo más extremo, irte de viaje con ellos y no dejar de mostrar todo lo que vas haciendo. Las opciones son infinitas, así que en este post vamos a ver el cómo hacer streamings IRL desde nuestro dispositivo móvil: una opción muy fácil y asequible.
Primero de todo, hay que distinguir precisamentre entre dos tipos de streaming IRL: uno más de estar por casa, que puedes configurarlo todo fácilmente desde tu dispositivo móvil y sin tener que invertir dinero, que es el que veremos en este post, y el más profesional, donde sí que tendrás que adquirir toda una serie de componentes para enseñar el mundo tus actividades fuera de casa. Un kit de streamings IRL profesional cuesta unos 2.000 euros en total.
Claro que lo primero que tienes que entender es que a diferencia de un streaming desde el ordenador, haciendo IRL encontramos tres diferencias básicas que tendremos que cubrir de una manera u otra:
- No dispones de un ordenador
- No dispones de un suministro de energía
- No dispones de una conexión a Internet estable como sería una conexión por cable
Cómo hacer streamings IRL desde el móvil: paso a paso
1- Descargar la aplicación de Streamlabs
Antes de invertir miles de euros en un kit para streamings IRL profesional, te recomendamos que empieces por algo más básico: hacerlo desde tu dispositivo móvil. Lo mejor es que uses directamente una aplicación como la de Streamlabs: Live Streaming App. Gracias a esta aplicación, podremos hacer un streaming IRL de forma fácil y sin invertir dinero, ya que son de uso gratuito.
La verdad es que esta aplicación es más que suficiente y nos permitirá mostrar cosas en la pantalla como alertas, el chat, etc. La configuración es realmente fácil, ya que te permiten sincronizar los streamings con la mayoría de plataformas, incluidas Twitch, Youtube y Facebook: solo tendrás que habilitar el modo IRL. Más información en la página oficial de Streamlabs.
2- La conexión a Internet
Tendremos que tener en cuenta el tema de la conexión a Internet: lo más importante de los streamings IRL es la estabilidad de nuestra conexión, mucho más que la calidad de imagen, por ejemplo. Las interrupciones y fallos técnicos siempre son un gran obstáculo en los streamings: aparte de cansar a tu audiencia, el hecho de volver a reiniciar un streaming es una pérdida enorme de espectadores y es lo último que queremos que nos pase.
Si hacemos streamings IRL desde el móvil, hay que tener en cuenta que solo disponemos de una sola conexión: o bien WI-FI o el uso directamente de los datos del móvil. Como siempre decimos, una conexión inalámbrica de Internet no es lo óptimo para hacer streamings, pero en este caso no tenemos más opción y deberemos correr el riesgo.
Lo mismo pasa con los datos móviles, sobre todo si queremos hacer streamings fuera de casa, ya que si tenemos contratados unos datos limitados puede que se terminen muy rápidamente o que no nos lleguen para hacer un streaming IRL. Del mismo modo que si estamos a un sitio con poca cobertura, nuestro stream se verá cortado. En este caso, tener un plan de datos ilimitados podría ayudar pero aun así, el riesgo siempre está y tendrás que tener en cuenta el pago extra que te supone contratar este plan de datos.
Los streamings IRL desde el móvil los recomendamos como algo para empezar y hacer vida en casa: enseñar cómo cocinas, cómo construyes alguna maqueta, haces manualidades, etc. pero no para situaciones donde requieres todavía más una conexión de Internet segura. Si vamos a dar el salto y empezar con los streamings IRL profesionales, existen productos que permiten hasta un total de cuatro conexiones a Internet para evitar fallos técnicos, aunque son bastante caros (sobre los 1.000 euros).
3- Ajustes del streaming: bajar la calidad
Una vez ha quedado claro el tema de Internet, compartimos un par de recomendaciones sobre los ajustes del streaming para evitar estos fallos técnicos.
Primero de todo, será bajar nuestro streaming a un máximo de 720p a 30 fps. Normalmente, si tenéis un ordenador potente, seguramente haces los streams a 1080p e incluso a 60 fps. Para los streams IRL, se recomendaría bajarlo para evitar cargar demasiado la conexión. Del mismo modo, también habría que revisar los bitrate y ajustarlos.
Lo que decíamos al principio: cuando se trata de streamings IRL, hay que priorizar la estabilidad de la conexión. Y aun con estos ajustes, nuestro stream se verá la mar de bien.
4- Estabilidad de imagen
Si vamos a tener el móvil en movimiento durante todo el streaming, sí que es importante contar con un esabilizador de imagen. Son bastante asequibles y puedes usar desde el típico palo de selfies o un estabilizador con soporte para móviles, que sí son algo más caros: esto como tu prefieras.
Estabilizador Móvil – Hohem Gimbal Móvil Plegable con 5 Modos para Vlog/Youtuber, 3 Ejes Estabilizador Carga de 280g Compatible con iPhone12/11/Xs MAX/Samsung Galaxy/Huaiwei/Xiaomi etc
Realmente, solo tendremos que invertir en este producto para que no se nos vea todo el rato en movimiento; por el resto, ya veis que es gratuito y para hacer un streaming IRL con el móvil no necesitamos mucho más. Como extra, si vamos a salir de casa, sí que os recomendamos también una batería portátil para el móvil, ya que hacer un directo consume mucha batería y así nos aseguraremos que nos dure mucho más tiempo.
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